Se me caía la puta baba por la chica del chándal verde

A mí, en clase, se me caía la puta baba por la chica del chándal verde.

No, no te voy a soltar su nombre.

Las leyendas no tienen nombre, tienen apodo.

Y no,

no es que la llame la chica del chándal verde

Pero este es mi blog, mi territorio, y aquí las personas son ideas.

Y reflexionando acerca de la fotografía, me he acordado de ella

Pues esta chica, además de muy guapa

era un ejemplo de seriedad,

trabajo,

disciplina

y buen comportamiento

Ella era la primera fila.

¡Con dos cojones!

Y luego estaba yo.

En la última,

con ganas de dar por saco

y con los deberes sin hacer

¡Así me ha ido!

Los que han coincidido conmigo en alguna clase lo saben de sobra:

yo iba a hacer el mongolo.

Era mi puto trabajo.

El graciosillo. El tontaina.

Las dos cosas significan lo mismo, no nos vamos a engañar ahora.

Habrá gente a la que le hiciera gracia.

Y otros, que me odiarán de por vida.

A los primeros:

perdón por no haberos hecho reír más.

Si eres de los segundos, de los que aún me odian...

pues nada.

....¡Qué te den pomada!

Mi problema no ha sido otro que una edad del pavo que se negó a morir.

Un pavo que ha sido una puta condena bíblica.

Empezó a los trece,

con los primeros granos y la voz de pito,

y ha terminado en febrero de este mismo año.

A quince putos años de jubilarme.

Haz las putas cuentas.

Son 37 años de puta cena de Acción de Gracias.

Un pavo tan gordo que no cabe en el horno.

Pero de toda esa mierda,

de ese pavo tan jodidamente largo,

he destilado una única verdad.

La puta columna vertebral de mi fotografía.

¿Qué cojones es la vida?

No es tomarse las cosas en serio O de cachondeo.

¡La vida es la puta guerra entre las dos cosas!

La vida es la chica del chándal verde

Y el cabrón que da por culo en la última fila.

Es el orden intentando sobrevivir DENTRO del caos.

Y ese contraste,

esa puta batalla campal,

es lo único que busco con la cámara.

Es lo único que cuenta una historia de verdad.

Y si en medio de ese choque de planetas encuentras una puta chispa de humor, agárrala,

porque esa foto no será la hostia.

Será LA PUTA HOSTIA.

Lo demás es mentira.

Es un decorao.

Es puto paisaje.

Postales de mierda para turistas con el alma muerta.

El graciosillo contra la responsable.

El gordo contra el flaco.

El alto contra el bajo.

El feo contra el guapo.

Busco los antónimos.

Las contradicciones.

Un saludo a todos los que habéis compartido alguna puta clase conmigo.

Y que no os engañe el graciosete:

aunque iba a lo mío,

aún me acuerdo de los nombres, apellidos y hasta de las fechas de cumpleaños de casi todos vosotros.

Desde la escuela, hasta BUP, pasando por la puta mili y hasta febrero de este mismo año.

La memoria es el arma del que ha estado observando todo el puto rato.

Y un saludo aún más (y muy, pero que muy) especial a la chica del chándal verde.

Tenías razón.