top of page

Cómo Fotografiar un Fantasma en una Puta Frutería

ree


En mi búsqueda del color, en esta puta neura que me ha dado, me he parado a pensar.

¿Dónde cojones puedo encontrar colores puros, brutos, sin filtros?


Y de repente, me ha venido a la mente el frutero.

El puto frutero que había en casa de mis padres cuando mis hermanos y yo éramos unos mierdas.

Joder, la de fruta que compraba mi madre. Manzanas, plátanos, naranjas... un arcoíris en un cuenco de plástico de colores

Pues nada, Miguel. A las fruterías.


He estado dando una vuelta por los mercados, por las calles.

Viendo puestos de fruta.

Me preguntaban qué quería y yo, como un puto loco, les decía que quería "un kilo de fotos en color".

No me entendían.

Normal.

No hablamos el mismo idioma.

Ni yo hablo chino, ni ellos entienden de fotografía.


El caso es que he estado ahí, parado, analizando.

¿Cómo cojones se fotografía una frutería?

¿Cómo capturas esa explosión de vida sin que parezca un puto bodegón de un pintor aficionado?


Pues no tengo ni puta idea.


Pero ya he movido la primera piedra.

La que más pesa, la que menos vale, pero la que va a sostener todas las siguientes.

He hecho esta foto que abre la entrada


No vale para nada.

Es un primer paso torpe.

Solo sirve para que haya una segunda foto.

Y una tercera.

Porque voy a fotografiar fruterías.

Y no es solo por la puta búsqueda del color.

Es porque sé que me va a hacer recordar. No solo el frutero de mi casa, sino a mis padres, a mis hermanos, a mí... en aquella época tan jodidamente especial.


Es inevitable escribir estas últimas líneas con lágrimas en los ojos recordando a mi hermano Carlos.


Un beso allá donde estés, gordo. Te quiero.

 
 
 

Comentarios

Obtuvo 0 de 5 estrellas.
Aún no hay calificaciones

Agrega una calificación
bottom of page